sábado, 21 de agosto de 2021

MEMORIAS DE UN SOLDADO GUADALCANALENSE SUPERVIVIENTE EN EL CENTENARIO DEL DESASTRE DE ANNUAL (1921-2021


Con ocasión del centenario del Desastre de Annual, este artículo pretende ser un modesto homenaje, una centuria después, a los caídos y a los supervivientes de la cruenta batalla en la que los militares del ejército español sufrieron verdaderos horrores de toda índole.

En este escenario bélico aparece un guadalcanalense, Don Rafael Miguel Chaves Chaves, conocidos por los paisanos como “El llorón”, a la sazón bisabuelo de quien suscribe, y lo más importante, superviviente de aquel conflicto que marcó el devenir de la historia de España años después. 

Por fortuna, antes de fallecer, Rafael, dejó legado para las generaciones venideras su relato, sus penas y los avatares militares sufridos en primera persona en aquel verano de 1921, en un territorio inhóspito, desolado por la muerte y la sangre derramada por miles de soldados que perecieron en el frente a manos de las fuerzas rifeñas.

En los últimos años, diferentes estudios, ensayos y artículos han tratado de arrojar luz a este episodio de la historia militar española. En este sentido, el denominado Expediente Picasso editado en 1931, siendo hasta finales del siglo XX, única publicación que puso encima de la mesa los acontecimientos desarrollados en aquellas semanas del verano de 1921 y que, a la postre, se pudo conocer, en parte y de manera aproximada, el proceso de investigación y de depuración de responsabilidades del Desastre de Annual. A modo de cifras podemos decir que aproximadamente en torno a 10.000 españoles (las cifras exactas a día de hoy no se han podido determinar) murieron en lo que, más que una batalla, fue una salvaje matanza a manos de las cabilas rifeñas.

Como se ha advertido en párrafos precedentes, Rafael Miguel Chaves, en el día de su noventa cumpleaños el 20 de julio de 1989, a través de su testimonio oral se pudo transcribir para la posteridad, gracias a una de sus nietas Rosa María Rius Chaves, la historia de aquellos días, haciéndose eco de dicho relato, años después un artículo firmado por Joaquín Gil de Honduvilla, Licenciado en Derecho por la universidad de Cádiz; licenciado en Geografía e Historia por la UNED; Doctor en Historia por la universidad de Huelva; Doctor en Derecho por la Universidad de Sevilla. Teniente coronel del Cuerpo Jurídico Militar; diplomado en Derecho Internacional Humanitario y el Movimiento Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja, por la Cruz Roja Española, Centro de Estudio del Derecho Internacional Humanitario; diplomado en Derecho Operativo y en Derecho Penal Militar por la Escuela Militar de Estudios Jurídicos. Académico de la Real Academia de Legislación y Jurisprudencia, donde plasma una cronología de los acontecimientos, desde el punto de vista histórico, junto con el citado relato por parte de nuestro protagonista, el soldado Rafael Miguel Chaves Chaves, publicado íntegramente en la Revista de Historia y Actualidad Militar en el nº 27 (2012).

Rafael Miguel Chaves Chaves, nació en Guadalcanal el día 20 de julio de 1899, en el seno de una familia de agricultores: “En primer lugar tuve la desgracia mayor de mi vida a las dos horas de nacer, me quedé sin madre y ni siquiera una fotografía para poder decir ¡esta es mi madre!”

En segundo lugar, en 1918 atravesé el año de la gripe, en el cual también estuve entre la vida y la muerte, en este caso también la vida, gracias a Dios”.

Así relata nuestro protagonista los primeros compases de su vida en las páginas de la revista militar. “La infancia y mocedad de Rafael transcurrieron en su pueblo natal marcado, como sucedía en gran parte de la población agrícola española de su época, por una realidad social y económica poco estimulante”[1].

El 1 de agosto de 1920, Rafael fue llamado a servir a las armas, quedando bajo el control de la Caja de Reclutas de Carmona núm. 18. Fue en febrero del año 1921, cuando causó alta en el Regimiento de “Cazadores de Alcántara” 14º de Caballería, incorporándose el día 27 del citado mes a su unidad.

De este modo lo recuerda Rafael en sus memorias: “En el año 1921 ingresé en el servicio militar. Fui destinado a Melilla al Regimiento de Cazadores de Alcántara 14, de Caballería, Segundo Escuadrón. Hice la instrucción en Segangan, donde mis compañeros y yo aprendimos a montar a caballo. Una vez acabada la instrucción hicimos la jura de bandera, en la plaza de Melilla, y posteriormente fuimos destinados a un campamento llamado Adriu (sic.)”

En referencia al campamento, en realidad se denominaba Dar Drius. “La brevedad de los plazos con los que eran conducidos al frente los reclutas, lo dice todo.  La jura de bandera de Chaves tuvo lugar el 17 de mayo de 1921, el 13 de junio era dado de alta de instrucción, marchando al día siguiente a incorporarse a su Escuadrón, es decir, apenas tres meses desde incorporación a filas aquellos muchachos eran mandados a una guerra, en un terrero, y con unos métodos de combate que casi desconocían completamente.”[2]

En el relato de nuestro protagonista pocas son las referencias sobre los días de combate. Los recuerdos se centran, principalmente, en el periodo que transcurre desde que fue hecho prisionero por parte de los rifeños y su liberación. No obstante, el soldado Chaves cuenta algunos hechos vividos en primera persona los días del Desastre.  Al poco tiempo de estar en Adrius (Dar Drius), estalló la guerra, donde saliendo a la defensa de Annual (campamento general al mando del teniente coronel Don Fernando Primo de Rivera), llegamos nuevamente a Adrius, ya que Annual iba en retirada. Al día siguiente fue cuando se dio la carga del Gran Puesto, en que los moros nos iban rodeando. Fue entonces cuando el teniente coronel Don Fernando dio la voz de ¡sálvese quien pueda! Salimos cada uno por donde pudimos, Primo de Rivera se refugió en el Monte Arruit, donde murió a causa de un balazo en un brazo”.

Lo más trascendental, quizás, fueran los diversos contratiempos previos a su cautiverio. A sus noventa años, Rafael trazó en su mente, de forma extraordinaria, los hechos vividos en su pellejo una vez hecho prisionero. Erizan cuanto menos el vello sino se escapan unas lágrimas al leer su relato: “En la huida algunos tuvimos la suerte de refugiarnos en el aeródromo de Seruán, donde los moros nos tuvieron sitiados ocho días. Al cabo de dicho tiempo, éstos se presentaron con banderas blancas pidiéndonos la paz y vendiéndonos uvas. Nos dijeron que nos entregásemos, ya que Monte Rui se había rendido. Fue entonces cuando dos tenientes que estaban a nuestro mando se marcharon con los moros a Monte Rui, para ver si lo que decían era cierto. Dichos tenientes no volvieron, y sin poder más, nos rendimos el 2 de agosto de 1921, prendiéndole fuego a cinco aviones que allí había, para que los moros no se sirvieran de ellos. Cuando nos rendimos nos encerraron en un corral, y a cada instante nos registraban para ver si teníamos dinero, quitándonos la ropa de cintura para arriba. Posteriormente, el día 4 de mismo mes se rindió la Alcazaba de Seluán, que estaba a pocos metros de nosotros.  Fue entonces cuando salimos de aquel maldito corral a la bandada, cada uno por donde pudo, ya que los moros se liaron a tiros con todos los que allí estábamos como prisioneros.

Dos compañeros y yo pudimos escapar por un pequeño arroyo, íbamos en fila india, pero al poco tiempo de haber cogido el arroyo, los dos compañeros que delante de mí caminaban agazapados, ambos fueron muertos de un disparo. Yo desesperado me tiré al suelo haciéndome el muerto, lo cual fue mi salvación, ya que los moros iban corriendo a caballo detrás de los que corrían.

Una vez pasada la gran avalancha me incorporé saliendo a rastras por el arroyo, encontrándome un poco más abajo a dos moros, llevando uno de ellos una horquilla y el otro una navaja de gran tamaño. Les pedí que me dieran agua, pero no lo hicieron, ellos sólo buscaban dinero, y al ver que yo no llevaba dinero alguno, me dijeron: - Tu marchar o pegar puñalada por barriga.

Sin poder hacer nada me marché refugiándome en una pequeña mancha en el monte, me encontraba como las libres, pegado a la tierra.

Al llegar la noche, salí a rumbo perdido, sin saber por dónde caminaba, a veces me metía entre las cávilas (éstas eras las casas de los moros), donde los perros se echaban a ladrar, era entonces cuando me quitaba los zapatos y echaba a correr entre dichas cávilas.

Estuve toda la noche perdido buscando agua sin poder encontrarla, llevaba una sed que me ahogaba. Fui caminando por una carretera, en la cual a un lado había una vivienda y a pocos metros un pozo, quitándome la bota la até a un cable de teléfonos que estaba allí tirado, y la arrojé a un pozo, sin embargo, el pozo estaba seco. Sin poder hacer nada, seguí caminando por la carretera y al llegar a una pequeña montaña, fue cuando escuché cantar a una rana, corriendo me dirigí hacia ella, y fue entonces cuando me encontré aquella fuente cristalina, en la cual puede aplacar mi sed. Una vez aplacada ésta, me metí en un gran montón de cebada donde me quedé dormido, ya que estaba agotado de tanto caminar y no dormir.

Soñando que habían llegado las fuerzas españolas desperté, y aburrido de mi vida, fui otra vez a beber y me senté al lado de aquella fuente. Al poco tiempo pasó una mora que iba a guardando vacas, al verme comenzó a gritar y entonces fue cuando se me presentó un moro con un fusil y unas barbas que le llegaban a medio pecho. Creí que era el fin de mi vida, pero me equivoqué, el moro se puso hablarme y me dijo: - paisa tú no tener miedo, yo no hacer nada-. Me dijo que estuviera allí sentado a la sombra de un árbol, porque en la cávila había un grupo de moroso que no eran de confianza.

Me quedé allí sentado como me dijo, y ya por la tarde regreso a por mí. Aquel moro llamado Aisa y toda su familia se portaron muy bien conmigo todo el tiempo que pase con ellos, yo era mudo para los extraños, y bautizaronme nuevamente con el nombre de Mimú. Un día, cuando estaba trabajando con Aisa, llegó un moro diciendo que iba recogiendo a todos los soldados españoles que por allí se encontraban. Yo no dije nada, pero él se acercó a mí, y me dijo: - Yo sé que no eres mudo y que está aquí refugiado-. Me dijo que, si me marchaba con él, me presentaría ante el Consulado Español, como así fue.

Me marché con éste, y al avanzar las fuerzas españolas, yo y otros muchos soldados, fuimos trasladados a Candusi (Kandussi-Melilla) y, posteriormente, al cabo de cinco meses a la zona francesa, pasando por el rio Melulla, cogido a la cola de un camello, ya que éste llevaba mucha agua. Nos dirigimos hacia Argelia para trabajar. Ofreciéndoles todo el dinero que allí ganara, e incluso, la propuesta de escribirle a mis padres para que ellos me mandaran también dinero. Conseguí escapar y llegando a un pueblo llamado Urda (protectorado de Francia) fue cuando pude deshacerme de ellos, presentándome al Consulado Español, al cual fui, como dije antes, por un moro. A los ochos días de estar en Urda, me llevaron a Oran, donde embarqué para Melilla. Posteriormente, fui llevado a declarar ante el General Picasso, preguntándome éste como lo había pasado”

Según podemos adivinar en su hoja de servicio, la escapada de sus captores tuvo lugar el 4 de diciembre, llegando el día 15 del citado mes a la plaza de soberanía española en la ciudad de Melilla. 

Estando en la zona española del actual Marruecos, Rafael, tuvo que integrase en el Regimiento, sin embargo, dado su lamentable estado de salud, permaneció ingresado en el Hospital de Alfonso XIII. Sanado de sus dolencias “le concedieron quince días de permiso” según el relato de Rafael. Sin embargo, en la hoja de servicios señala “veinticinco días, por lo que nuestro protagonista embarcó el día 31 de diciembre, con el fin de dirigirse a Guadalcanal para encontrar cobijo entre los suyos”. [3]

Como no podía ser de otra manera en su memoria guardó, hasta el día de su fallecimiento, el regreso a nuestro pueblo después de atravesar mil y una vicisitudes. De este modo dejó para los anales, la crónica del regreso a su pueblo natal, Guadalcanal: “no se pueden imaginar el recibimiento que tuve de todo el pueblo, y en especial, de mi padre y de mi familia. También subió a la Estación la banda de música, la cual se puso a tocar en el momento de mi llegada. Aquella tarde dieron un baile en mi honor, y un gran banquete el cual se celebró en la fonda de Prudencio”.

Finalizado el permiso, el 28 de enero de 1922, de nuevo el soldado Rafael Miguel Chaves, se incorporó a filas en el Regimiento donde le asignaron destino en el almacén de vestuario y armamento.

El día 10 de noviembre de 1923 fue convocado “por el mando para asistir a Madrid a unos actos en los que intervendría como protagonista de los hechos sucedidos en julio de 1921”.[4] En efecto, nuestro paisano, fue uno de los escasos supervivientes de la gesta del Regimiento de los Cazadores del Alcántara nº 14. Este hecho lo recuerda, Rafael, a través del siguiente relato: “En el año 1923, cuando entró en el poder Primo de Rivera, fueron sacados los restos de su hermano Don Fernando acompañados de veinticinco supervivientes que habíamos quedado. Aquella noche nos dieron una cena, más de 25 pesetas a cada uno de nosotros por acompañar hasta Madrid los restos de Don Fernando, el cual murió en Monte Ruí en el año 1921. Una vez llevado el cuerpo a Madrid, nos ofrecieron una gran comilona en el Palacio Real. Posteriormente regresamos a Melilla para acabar de cumplir el servicio militar. Allí estuvimos hasta el día de nuestra licencia, la cual a mí me correspondió en enero de 1924”.

Una vez concluido el servicio militar, Rafael regresó a Guadalcanal, donde pasó el resto de su vida, formando una gran familia junto a su esposa Doña Encarnación Caro Prieto, dedicándose a las labores agrícolas hasta su jubilación. Del matrimonio Chaves Caro, nacieron mi abuelo, Rafael Miguel Chaves Caro y sus hermanos Jesús Chaves Caro, Carmen Chaves Caro, Encarnación Chaves Caro y Ángeles Chaves Caro.

Nuestro abuelo y tío, respectivamente, nos ha relatado la “historia” de su padre, como él la denomina.  A modo particular, siempre despertó en mi un especial interés la historia de mi bisabuelo Rafael Miguel, quien tuve la suerte de conocer en vida, ya que falleció en 1997 a la edad de 97 años y por entonces, servidor, contaba con 9 años.

No fue hasta el año 2012, el Consejo de Ministros aprobó el día 2 de junio del citado año la concesión de la Cruz Laureada de San Fernando al Regimiento de Caballería del Alcántara nº14 , llegando, noventa años después, el reconocimiento a los hechos acaecidos entre el día 22 de julio al 9 de agosto de 1921, cuando dicho Regimiento, dio protección al repliegue de las tropas españolas desde las posiciones de Annual hasta el Monte Arruit, donde perecieron en el campo de batalla gran parte de los oficiales y soldados a manos de las tropas del líder rifeño Abdelkrim que consiguieron tomar los puestos fortificados que circundaban a Annual.

“Al teniente coronel Fernando Primo de Rivera le fue concedida la Laureada de San Fernando a título póstumo, pero el sacrificio de sus hombres no fue debidamente recompensado por los que dirigían nuestra nación, más bien todo lo contrario”[5].

Como se ha referido anteriormente, han tenido que transcurrir más de noventa años para el Gobierno de España honrara la memoria de estos hombres que dieron todo lo que podían ofrecer en aquel conflicto armado, muchos de ellos, reclutas, con una instrucción exprés y sin experiencia militar previa.

Tristemente, la máxima condecoración de las FF.AA. llegó tarde, ya que, todos aquellos soldados supervivientes en los que se encontraba Rafael, habían muerto.

En una conversación mantenida con Francisco Miguel Jiménez Chaves, en la actualidad subteniente de infantería, nieto de nuestro protagonista y primo segundo de quién suscribe, acordamos rendir un tributo a la memoria de nuestro abuelo y bisabuelo, respectivamente, mediante este modesto artículo donde se ha intentado plasmar, de forma, general, la historia personal de nuestro familiar, con el propósito que las futuras generaciones de guadalcanalenses sean conocedores de estos sucesos de la historia de España de entreguerras, por muchos desconocida, pero que, de un modo u otro, se encuentra inserta en el patrimonio inmaterial, intangible y humano de nuestra villa.

No cabe duda, que la historia de nuestro familiar se puede asemejar en contenido a otras tantas de militares oriundos de Guadalcanal que- si se me permite la expresión- pasaron las de Caín, en sus respectivas responsabilidades militares en tiempos de guerra.

Don Rafael Miguel Chaves Chaves, fue el último superviviente del “Alcántara” en fallecer en el año 1997, después de una vida cargada de mil y una historias en su haber.

Sirvan estas líneas a modo de tributo póstumo a su memoria y legado, “Andé”

José Antonio Zújar Chaves – Francisco Miguel Jiménez Chaves, junio 2021.

BIBLIOGRAFÍA:

Gil Honduvilla (De), Joaquín. “Memoria de un soldado del Alcántara” Revista de Historia y Actualidad Mililtar ARES. Año 5, nº 27, 2012, Valladolid.

Fotografía: Rafael Miguel Chaves Chaves en una fotografía de estudio portando el uniforme su Regimiento.



[1] Gil Honduvilla (De), Joaquín. “Memoria de un soldado del Alcántara” Revista de Historia y Actualidad Mililtar ARES. Año 5, nº 27, 2012, Valladolid.

[2] Gil Honduvilla (De), Joaquín, 2012, pp.24

[3] Gil Honduvilla (De), Joaquín, 2012, pp. 27.

[4] Gil Honduvilla (De), Joaquín, 2012, pp. 28

[5] Gil Honduvilla (De), Joaquín, 2012, pp. 28

jueves, 23 de mayo de 2013

La figura del Defensor del pueblo andaluz. Una visión desde el Estatuto de Autonomía.

La jornada daba sus últimos coletazos cuando saltó a la opinión pública la noticia más comentada durante estas últimas horas, el relevo en el cargo de la institución del Defensor del Pueblo Andaluz. En muchas ocasiones se antepone la polvareda que puede levantar una noticia de este calibre en perjuicio del valor que la institución del Defensor del pueblo posee, en el marco que establece el Estatuto de Autonomía de Andalucía, para después desplegar su figura en el seno de la sociedad andaluza. 

Por ello, es menester, recuperar un pequeño trabajo llevado a cabo en octubre del 2009,  en el marco de la asignatura "Gobierno autonómico y local" donde se pone de manifiesto la figura institucional del Defensor del pueblo andaluz. 

De entrada, señalar el acomodo que dicha figura halla dentro del marco del Estatuto de Autonomía de Andalucía, concretamente, en el Titulo IV "Organización institucional de la Comunidad Autónoma", Capítulo IV "Otras instituciones de autogobierno", art. 128. Del Defensor del Pueblo Andaluz. Textualmente dicho precepto recoge lo siguiente: "1. El Defensor del Pueblo es el comisionado del Parlamento, designado por éste para la defensa de los derechos y libertades comprendidos en el Título I de la Constitución y en el Título    I del presente Estatuto, a cuyo efecto podrá supervisar la actividad de las Administraciones públicas de Andalucía dando cuenta al Parlamento. 2. El Defensor del Pueblo Andaluz será elegido por el Parlamento por mayoría cualificada . Su organización, funciones y duración del mandato se regularán  mediante ley. 3. El Defensor del Pueblo Andaluz del Pueblo designado por las Cortes Generales colaboraran en el ejercicio de sus funciones."

         En este sentido, las consideraciones que podemos establecer en relación a lo expuesto anteriormente son las siguientes. 

Se ha  mencionado que el defensor del pueblo es elegido por el Parlamento de Andalucía, y es por este motivo esté debe presentar ante la Cámara andaluza un informe donde se recoja la actividad, quejas, peticiones etc, que durante el ejercicio, la institución ha recibido. 

Otra característica fundamental que define al Defensor del pueblo es su carácter independiente de otros órganos de gobierno del entramado institucional de la Junta de Andalucía. En efecto, el Defensor es designado por el Parlamento por mayoría cualificada, lo que deja entrever un consenso entre los diferentes grupos políticos  que se dan cita en sede parlamentaria. No obstante, el defensor actúa de forma autónoma y  por ende, no recibe indicaciones de ningún órgano político y/o administrativo.

            El Defensor del Pueblo comienza a desplegar sus actuaciones en el preciso instante que le es notificado una queja de un ciudadano. Cabe reseñar la potestad que el Defensor tiene conferida al iniciar de oficio una investigación para vislumbrar que acto o decisión pueda ser presuntamente lesivo para los derechos de los ciudadanos en un proceso administrativo.

Partiendo de esta idea, se desprende que la figura del Defensor actúa en pro de una eficaz relación entre el ciudadano y los Órganos de la Administración, entronizándose como mediador de conflictos que puedan surgir dentro de la lógica convivencia entre sociedad y administración. En suma, el Estatuto dota al Defensor como garante y salvaguarda de los derechos del pueblo andaluz.

            Siguiendo la línea, podemos decir que el Defensor del pueblo puede “investigar los actos de los Organismos dependientes de la Administración pública andaluza y los agentes de está (Consejerías, Delegaciones Provinciales, organismos autónomos, Agencias, empresas públicas, hospitales, centros médicos públicos, centros docentes)”[1] y un largo etc.
Pero, la figura del Defensor no puede inmiscuirse en  una investigación que verse sobre   cuestiones que a continuación se detallan.
“Asuntos que estén pendientes de resolución judicial o hayan sido resueltos por jueces o Tribunales que se integren dentro del poder judicial.

También asuntos que se enmarquen dentro de la órbita de lo privado de entre particulares, entre otros.

No podrán presentar quejas ante el Defensor del Pueblo Andaluz ninguna autoridad administrativa en asuntos de su competencia.

Cualquier persona física o jurídica, puede acudir al Defensor del Pueblo Andaluz, siempre que invoque un interés legítimo.”[2]

            Otra cuestión importante de señalar, es que Defensor del  Pueblo Andaluz debe atender todas las quejas sin distinción de ningún tipo, es decir, no importa que sea o no ciudadano de la Comunidad, no importa su nacionalidad, entre otros.
           
Para la presentación de la queja no se necesitaba la asistencia de abogado y procurador, y el procedimiento de tramitación es totalmente gratuito. El nombre de las personas que presenta la queja se mantiene en secreto frente a terceros y a organismos no implicados en el problema.

 Se inaugura una nueva etapa al frente de la institución del Defensor del Pueblo Andaluz con el relevo del cargo que ostentaba D. José Chamizo de la Chica, desde 1996 hasta la fecha, en favor del hasta ahora responsable del Comisionado del Polígono Sur de Sevilla D.Jesús Maeztu. Qué duda cabe de la gran labor llevada a cabo por Chamizo muchas veces tapada por la gran sombra de la actualidad política de primer nivel. Me consta que su labor al frente de dicha Institución se ha caracterizado por tener más luces que sombras durante el ejercicio de su mandato. Muchos nos preguntamos el porqué de su relevo. Esto es harina de otro costal. Sin duda Maeztu se le presupone que estará a la altura del cargo que conlleva ser Defensor del Pueblo Andaluz. El tiempo, el que da y quita razones.




[1] De la Página web  oficial del Defensor del Pueblo.
[2] http://www.defensor-and.es/el_defensor/que_no_puede/

miércoles, 22 de mayo de 2013

Corrupción e insatisfacción política. Breve análisis.




La presente reflexión versa sobre  la percepción del fenómeno de la corrupción política en los países que integran la Unión Europea. A partir del artículo elaborado por el Profesor Rafael Vázquez García, expondré un análisis, entorno a los datos que se plasman en el artículo proporcionado por el propio profesor, además del porqué se producen diferentes percepciones acerca de la corrupción en los países del ente europeo y cuáles son las variables explicativas desde la óptica de la ciencia política.

El halo de la corrupción se ha manifestado, en sus diversas vertientes y formas a lo largo de la historia de las organizaciones políticas. Por lo pronto, podemos afirmar que el fenómeno de la corruptela, en mayor o en menor intensidad, ha sido un hecho inherente al propio individuo como integrante de la comunidad política.

El hecho de la “corrupción contemporánea”, se despliega por las democracias del continente europeo, desde la segunda mitad del siglo XX.  Este hecho, incide directamente en los aspectos de la vida de la ciudadanía, haciendo hincapié en la desafección de los propios ciudadanos ante la actividad política.

            Entorno al fenómeno de la corrupción podemos establecer dos bloques claramente diferenciados, por la percepción de la ciudadanía en los diferentes países. El rasgo diferenciador estriba, en buena medida, en la madurez del sistema democrático de los Estados y, siendo un factor principal a la hora de entender  el porqué de la importancia de la corrupción.

            Utilizando los datos que proporciona el barómetro de Transparency International con fecha de diciembre del 2004, podemos apreciar que los Estados que se enmarcan dentro de la llamada Europa occidental la visión de la ciudadanía ante la corrupción es más negativa respecto a la llamada pequeña corrupción, entendida esta como la corrupción dada a nivel local.
           
            Por el contrario, los países localizados en el este del continente, la percepción de la pequeña corrupción y la gran corrupción se perciben como un hecho de marcado carácter negativo por parte de la ciudadanía de países como, Albania, Polonia o Lituania entre otros.

            La corrupción trae consigo determinados problemas que merecen ser abordados, por ejemplo, la variable del desempleo se asocia a la corrupción, es decir, podemos apreciar que si un determinado país, se producen altos índices de desempleo, este hecho se relaciona con casos de corrupción.

            Este hecho se explica desde la percepción de la población dado que en países donde el desempleo es visto como una situación negativa se correlaciona con prácticamente los mismos índices en relación a la corrupción.

            Avanzando en la reflexión, debemos cuestionarnos cuales son las causas por las que la ciudadanía muestra niveles considerables a la desafección política y, que incidencia posee la corrupción en el escenario de la vida política. Ante esta situación, podemos establecer dos marcos analíticos diferenciados. Por un lado, aquellos países donde la democracia se halla en un proceso de madurez. Y aquellos, donde el sistema democrático, es un hecho consolidado. Es necesario realizar esta distinción, puesto que, los resultados que vierte la opinión pública son diferentes.

            Por tanto, podemos argumentar que tanto, partidos políticos, los  “profesionales de la política”, el poder legislativo y el poder judicial, son percibidos por la opinión pública como los factores clave a la hora de establecer la relación desafección política-corrupción.

            Resulta paradójico el hecho de que los Partidos Políticos sean vistos por la opinión pública, como medio canalizador de las demandas de la sociedad y sea uno de los pilares base donde se asienta el sistema democrático, y a la vez sea el principal factor clave para entender la desafección política y corrupción, puesto que estas instituciones son elevadas como el principal ente con tintes de corrupción en sus entrañas internas.

            Otra variable que podemos incluir en la relación que hemos establecido es las prácticas de la Administración pública. Se alza como otro factor explicativo de la llamada corrupción, dado que la sociedad muestra que el gigante burocrático, en ocasiones ha empleado mala artes en la misión de servicio público. Este hecho se produce principalmente en los países mediterráneos donde el sector público, ha expandido sus tentáculos por todas las instituciones del Estado.

            Existen estudios que demuestran que a mayor presencia del sector público en el Estado, los casos de corrupción son más elevados en comparación con países donde el sector público es menos predominante.
           
            Cabe destacar que los casos de corrupción producen directamente en al ámbito de la política un efecto negativo, en buena medida, debido a los casos que salen a la luz pública proceden desde el ámbito político.

            A modo de conclusión podemos establecer varias ideas generales entorno al texto. En primer lugar, el consolida miento de las democracias juega un papel clave a la hora de entender la corrupción. Hemos visto que en los países donde la democracia es joven, la percepción de la corrupción en la vida política es mayor.

José Antonio Zújar Chaves.
Sevilla, enero de 2011.

jueves, 16 de mayo de 2013

Sobre la posible supresión de la histórica línea férrea Sevilla-Mérida y viceversa. Una visión desde la Constitución.

Tramo de la línea Sevilla- Mérida a su paso por Guadalcanal.

Cual pella de barro, el rumor de la posible eliminación del servicio ferroviario de las dos líneas que comunican la Comunidad autónoma de Andalucía con la vecina Extremadura (Sevilla-Mérida y viceversa, su variante Sevilla-Llerena y Huelva-Zafra), va, lamentablemente, cogiendo forma. 

Este nuevo amago para cercenar esta vía de comunicación, comienza el pasado jueves 27 de diciembre del 2012, cuando el Consejo de Ministros del Gobierno de España, aprueba el denominado "Plan de racionalización se los servicios ferroviarios"[1] en cumplimiento del Real Decreto Ley 22/2012 de 20 de julio, que establece las líneas maestras de cara a poner en marcha la "racionalización" de varias líneas de Media Distancia, a juicio de los técnicos de Fomento, ineficientes. 

En la mañana de hoy, El País, en su sección de Andalucía,[2] publica una noticia relativa a la cuestión que estamos abordando, dando por sentado la eliminación de este servicio ferroviario que ha vertebrado mediante el ferrocarril a estas dos regiones desde 1885 que se completaran las obras de todos los tramos de la línea.

  Ante esta disyuntiva, a servidor le planean varias cuestiones al respecto. ¿Deben imponerse los criterios económicos para desmontar un servicio público con más de cien años al servicio de los usuarios? Que debe prevalecer, ¿el servicio público como vía de movilidad de los ciudadanos o  criterios estrictamente economicistas?

Cabe recordar que la norma suprema de nuestro ordenamiento jurídico-Constitución española-tipifica en el Título I, Capítulo II  concretamente el art. 19  reza de así: "Los españoles tienen el derecho a elegir libremente su residencia y a circular por el territorio nacional. Asimismo, tienen derecho a entrar y salir libremente de España en los términos que la ley establezca. Este derecho no podrá ser limitado por motivos políticos o ideológicos" 
De esta consideración se desprende el llamado derecho de movilidad. El mencionado precepto deja a las claras la libertad que poseen los españoles de circular, sin corta pisas ni barreras de ningún tipo por todo el territorio nacional. Dicho derecho se asienta en lo tipificado en el art. 139.2 de la CE: "Ninguna autoridad podrá adoptar medidas que directa o indirectamente obstaculicen la libertad de circulación y establecimiento de las personas y la libre de la circulación de bienes en todo el territorio español”.

En este sentido, la lógica constitucional no deja lugar a dudas y establece el marco legal para salvaguardar los intereses de los ciudadanos referidos a la movilidad.
El caso que nos ocupa atenta de lleno con lo expuesto anteriormente. De entrada, plantear la hipotética supresión de las líneas citadas en párrafos precedentes, vulnera estos preceptos constitucionales amparados en el Capítulo II de la CE, y de especial protección.  La realidad es otra. Desde fomento priorizan la eficiencia económica de Renfe y Adif en detrimento de la eficacia constitucional a la hora de extrapolar la teoría recogida en esta norma a la realidad de los ciudadanos titulares en última instancia de los derechos que allí se compilan.  



[1] Véase el siguiente enlace referido al Plan de Racionalización de los Servicios ferroviarios: http://www.fomento.gob.es/MFOM/LANG_CASTELLANO/GABINETE_COMUNICACION/OFICINA_DE_PRENSA/NOTICIAS1/2012/Diciembre/121227-01.htm
[2] Enlace de la noticia publica por el diario “El País”. http://ccaa.elpais.com/ccaa/2013/05/15/andalucia/1368643534_044937.html

miércoles, 31 de octubre de 2012

¿Influye la psicología humana en la economía?

Hace aproximadamente un año realicé un comentario, tras la lectura del bestseller "Animals Spirits", cuyos autores son los afamados economistas George Akerlof (Premio Nobel de Economía) y Robert Shiller profesor de la Universidad de Yale (EE.UU).

El libro es realmente interesante ya que, profundiza en las teorías que nos han llevado a esta crisis económica y plantea una nueva visión de como ha de transformarse la ciencia económica incluyendo en  esos nuevos postulados a los espíritus animales, es decir, la psicología de los individuos racionales para con las decisiones económicas.

ANIMAL SPIRITS, COMO INFLUYE LA PSICOLOGÍA HUMANA EN LA 
ECONOMÍA. 

Este  libro ve  la  luz en un contexto donde  la economía  está  jugando un papel  más  que  notorio  en  el  día  a  día  de  los  ciudadanos  debido  a  la  actual  crisis  financiera en  la que estamos  inmersos. En opinión de  los autores de  la obra,  esta coyuntura actual hace que los individuos  comiencen a repensar sobre los  cimientos  de  la  economía  ya  que  se  hace  necesario  formular  o  dar  cabida  ciertos postulados de cara al mejor funcionamiento y desarrollo de la economía  en el largo plazo. 

 En este sentido,  la  tesis que defiende George Akerlof y Robert J.Shiller, a  lo  largo y ancho del libro versa sobre   importancia que posee  lo que Keynes dio  en  llamar  animal  spirits,  espíritu  animales,  poniéndose  de  manifiesto  la  relevancia  que tienen estos en la actividad económica y en su funcionamiento. 

 Históricamente desde que Adam Smith sentó las bases de la teoría económica  clásica, esta  no se ha preocupado en incluir en sus postulados a los espíritus  animales en el funcionamiento de la economía.  
Fue  Keynes,  quién  en  su  obra  Teoría  General  del  empleo,  el  interés  y  del  dinero abordo estos aspectos. La intención de los autores es dar a conocer que  detrás  de  la  dinámica  de  la  macroeconomía,  se  esconden  determinados  aspectos que más tarde abordaremos como la confianza, la equidad, la ilusión 
fiscal entre otros y que muchos economistas de nuestro tiempo no ha sabido o  mejor dicho no se les ha pasado por la cabeza incluir aspectos como el sentido  de la justicia en los salarios en la economía. Esta obra pretende argumentar en  resumidas cuentas que el funcionamiento de la economía no solo radica sobre 
los postulados de  la  teoría económica clásica y racional, sino que detrás de  la  misma  se  dan  las  percepciones  no  racionales  de  los  propios  individuos,  es  decir, los espíritus animales.  

Akerlof  y Shiller,  insisten en dotar a  la economía de unos nuevos postulados  poniendo de manifiesto un nuevo marco  conceptual que  insufle aire  fresco al  capitalismo que el mundo ha conocido hasta  la  fecha. Por ello, defienden que  los  individuos y su  impresión sobre  la marcha de  la economía, es una piedra  angular del  conjunto de  la economía  y de  su  funcionamiento,  y en  suma hay  que tenerlos en consideración en la nueva teoría económica. 

La  obra  se  articula  en  dos  partes  claramente  diferenciadas  pero  a  su  vez  conectadas entre sí. En  la primera parte se abordan cinco conceptos claves a  la  hora  de  entender  el  papel  que  desempeñan  los  espíritus  animales  en  la  economía.  La  confianza,    así  como  la  justicia  social,  la  equidad,  los 
comportamientos  corruptos  y  la  ilusión  monetaria,  explican  el  apartado  irracional o si se prefiere psicológico de  los espíritus animales y su  incidencia  en la fluctuación de la economía.  Me ha  llamado poderosamente  la atención  los ejemplos que se aportan sobre  la  incidencia  que  poseen  la  corrupción  y  las  historias  orales  en  el funcionamiento  de  la  economía.  ´
Un  ejemplo muy  clarificador  que  se  plasma  negro sobre blanco en el libro, es lo que se conoce como las crisis financieras  durante  la historia. Los autores demuestran que detrás de cada crisis se da  la  paradoja  que  durante  la  época  de  bonanza  económica  la  confianza  de  los  individuos  sobrevuela  en  la  economía. Cuando  la  confianza    de  los  espíritus  animales   se desvanece, por determinadas variables, entramos en un periodo de recesión económica. 
Por  lo  tanto, podemos afirmar  sin  temor a equivocarnos que  la percepción o  mejor dicho la fe que posen sobre la dinámica económica los individuos acerca  de la economía, esta es susceptible de verse inmersa en fluctuaciones.  

En  el  año  2001,  la  economía  mundial  comenzó  a  vivir  un  boom,  donde  el  exceso  de  confianza  en  los mercados  tuvo  su  resultado  en  el  incremento  de  forma  notable  de  la  adquisición  de  viviendas. El mercado  inmobiliario  estaba  inmerso en los años dorados. Algo extraño estaba ocurriendo, ya que parecía,  que  el  comportamiento  de  los  individuos  hizo  que  durante  estos  años  los  especuladores hicieran su agosto dentro del mercado inmobiliario.  

La  segunda  parte  del  libro  aborda  una  serie  de  cuestiones  relativas  a  la  influencia  de  los  conceptos  anteriormente  mencionados  en  las  decisiones  económicas  y  pretenden  esclarecer  en  forma  de  respuestas,    las  cuestiones  que  se  plantean.  Entre  las  más  destacadas  cabe  señalar  ¿Por  qué  las economías  caen  en  recesión?  ¿Por  qué  hay  personas  que  no  encuentran  trabajo?, ¿por qué los precios financieros y las inversiones corporativas son tan  volátiles?, ¿por qué los mercados inmobiliarios experimentan ciclos?, ¿por qué  ahorrar para  el  futuro  es  tan  arbitrario?  , ¿Por  qué  los  principales  banqueros   tienen poder  sobre  la economía  (en  la medida que  lo  tengan)?  y   por último,  ¿por  qué  la  pobreza  arraiga  durante  generaciones  entre  las  minorías  más  desfavorecidas?. 

Concluyen  Akerlof  y  Shiller  que  las  citadas  cuestiones  se  responderán más  fácilmente  si  los espíritus animales  son  tenidos en  consideración en  la  teoría  economía  actual. Si  esto  no  es  así,  la  cosa  se  complica  ya  que  afirman  que  sería  imposible arrojar una  respuesta a  las ocho cuestiones planteadas si nos  ceñimos  única  y  exclusivamente  a  las  tesis  que  a  día  de  hoy  imperan  en  la macroeconomía. 
A modo de epílogo,  la  idea estructural que se ha desarrollado a  lo  largo de  la  obra  se  asienta  sobre  la  base  de  la  inclusión  de  los espíritus  animales en  el  estudio de  la economía con el  firme propósito de construir un marco analítico  más  eficaz  y  que  nos  permita  conocer  mejor  y  comprender    tanto  a  economistas como a ciudadanos en general,  los entresijos de la economía, ya  que queda demostrado en libro que los espíritus animales son otra parte de la  economía que inciden en su funcionamiento y por ende son otra parte más de la disciplina. 

José Antonio Zújar Chaves. 
Guadalcanal. agosto de 2011

jueves, 18 de octubre de 2012

Naturaleza y elementos del poder regio (real). Una reflexión.


El concepto "Poder", "Poder Político" es un elemento capital en el estudio de la Ciencia Política como disciplina científica que estudia el fenómeno socio-político. Este ensayo nace con el objeto de dar respuesta a una cuestión planteada en el marco de la Universidad el pasado mes de abril donde el Catedrático en Historia del Derecho Dº José Mª García Marín y a la sazón profesor de la asignatura Historia de las Administraciones nos invitó a los alumnos presentes a confeccionar, en mi caso, una reflexión acerca de un capítulo denominado "Entorno a la naturaleza del poder real" inserto en la obra "Teoría Política y gobierno en la Monarquía Hispánica cuyo autor es el propio profesor. 

He aquí el resultado escrito de lo que fue una exposición oral de la cuestión.




EN TORNO A LA NATURALEZA DEL PODER REAL, UNA REFLEXIÓN.
El poder, como elemento primigenio de una comunidad de individuos, se entroniza la causa principal de esta exposición. Analizaremos las variables que dotaron al poder dentro del contexto histórico de la Monarquía de los Austrias durante los siglos XV-XVII en España. Pretendo aportar al trabajo una dosis importante de análisis político propio de la disciplina de la Ciencia política con la pretensión de  ir más allá de la compresión histórica de los hechos acaecidos, sin despojarnos del rigor histórico propio de tal menester.

Por tanto, estamos en condiciones de dibujar un punto de partida  a este trabajo sobre la noción que hoy se posee en relación a la forma de organización política que nace en Europa en el siglo XV para consolidarse posteriormente en las dos centurias siguientes. Nos encontramos dos visiones un tanto divergentes sobre la base de la naturaleza de la propia organización política, y el poder como elemento controlador de los designios de la misma.
Debemos remontarnos unas décadas atrás en el tiempo de entender el devenir que el concepto poder va a experimentar durante el reinado de los Austrias en España. La organización política del Medievo presentaba una característica esencial que se manifestaba en la adhesión de los súbditos con el príncipe o noble más cercanos a los dominios donde estos residían.

El punto de partida de este trabajo sienta sus bases en la lectura del artículo que da nombre a este trabajo cuya idea original proviene del profesor García Marín. Una primera cuestión a plantear sería la siguiente; ¿cabe hablar de un Estado de Renacimiento? ¿Se han abandonado los postulados medievales sobre la base de poder de una organización política?

En efecto,  el profesor F.Chabod, apuntaba la ruptura de un modelo político anterior de herencia medieval donde se enclavaba el poder como un elemento un tanto descafeinado. Por tanto si cabe hablar de un Estado del Renacimiento dado que supuso una carga innovadora respecto al periodo anterior, aún así elementos relevantes del Medievo, configuraron la organización política. Los elementos nuevos se revestirán como con una vestimenta tradicional (J.A.Maravall).

El poder político del renacimiento será personificado en la figura del monarca, será el centro de atención de quienes constituyen la comunidad política. El punto de inflexión para entender la construcción de la organización política viene de la mano del surgimiento, en el siglo XV de un cambio estructural que afecta al poder y se manifiesta en el nacimiento de un cuerpo de funcionarios al servicio de la organización política. Intentan  impulsar la política exterior, la consolidación de un cuerpo de diplomáticos al servicio de la Monarquía y la creación de un ejército permanente dependiente del poder central en manos del Rey.
Este cuerpo de funcionarios, de burócratas especializados es el factor determinante para entender la acción política de poder absoluto. Un hecho relevante que corrobora esta afirmación anterior subyace en la idea de que ningún Principie o Monarca podrá desplegar el poder absoluto si no cuenta con este cuerpo de burócratas especializados y al servicio del mismo. 

Como nota al pié decir, que cada príncipe traía consigo un conjunto de funcionarios, siempre rodeado de los mismos, y al frente sus ministros gobernando la nave del Estado. Estamos por tanto, ante una Administración pública en las que los oficiales y los ministros se hallan incardinados, constituyendo el soporte humano de cargos destinados al gobierno público.
¿Qué misión tienen encomendada los ministros y administración al servicio del Rey?
Básicamente es una misión principal, el logro de los objetivos encuadrados dentro de la lógica de la Monarquía católica, y de ella se desligan una serie de variables.
¿Cómo se estructura la organización política de la Monarquía de los Austrias?
La relación entre el Príncipe y sus colaboradores aparece delineada en base a un mandato representativo que en este momento se sustituye sobre la base de una concepción organicista del poder de tradición medieval y que tiene su fundamento en las Partidas de Alfonso X. El Rey será por tanto el supremo oficial de la organización. Algunos le han dado en llamar “dirección superior”, “supremo rector”. Estos calificativos giran sobre la base de la idea central de la noción del poder que se tiene en esta época.

En suma, hemos trazado de forma clara aquellas cuestiones que propiciaron el surgimiento de la nueva noción del poder político sin olvidar la reminiscencia del Medievo que influyeron en el mismo.
No obstante, es innegable la existencia de una prepotente nobleza que la nueva organización política surgida a fines del XV, tuvo que convivir con ella y hacer frente a la misma. El poder de la nobleza se asentaba en los grandes dominios territoriales o señoríos que constituían verdaderos centros de poder dentro del Poder político. En definitiva, la existencia de estos poderes intermedios es lo que justifica si verdaderamente se desplego un verdadero poder real por parte de la Casa de Austria. Trataremos de despejar la incógnita.

A primera vista nos surge una cuestión que va en concordancia con lo expuesto anteriormente, ¿Cómo conciliar el poder supremos del monarca con estos centros de poder dependiente de la nobleza dotados en buena medida de autonomía política, jurisdiccional y porque no decirlo social?
Para arrojar luz a esta cuestión debemos tener en consideración una serie de acontecimientos que surgieron al hilo del incremento del poder real como contrapeso al mismo la nobleza reactivo en cierto modo la preponderancia de la época medieval, así pues florecieron nuevos señoríos entre otros factores. En este sentido, algunos autores han bautizado a este fenómeno como “refeudalización” especialmente en el siglo XVII.

Con este panorama, es evidente la importancia del poder de los señoríos inmerso dentro de poder omnímodo del poder regio. ¿Por qué? Uno de los factores ha sido la presencia de señoríos jurisdicciones enraizados profundamente en las remotas estructuras de poder feudal. Otra variable explicativa de la importancia del poder señorial se explica por la existencia de los privilegios feudales que gozaban determinados territorios y municipios. A estos factores cabría añadirle la incidencia económica traducida en problemas a la hora de hacer frente a los costosos conflictos bélicos, amen, de las presiones tributarias especialmente en Castilla, con el objetivo de sufragar parte de los gastos de guerra. Esto se une al aumento de la conflictividad social en el Reino que tiene su explicación en los aspectos económicos comentados anteriormente.

Estas variables no supondrán un menoscabo al poder regio, en todo caso se erigían como meros limites a la extensión del mismo a esos territorios donde se dan estos fenómenos que hemos explicado hasta la saciedad  y merecen ser comentados de forma analítica y pormenorizada. Basta recordar que en la monarquía de la Casa de los Austria el equilibro de poderes se decanta a favor de aquellos centros de poder que se prodigaban a lo largo y ancho del Reino. Bobadilla insiste en la circunstancia inalterable y de por sí definitoria de la posición que a los poderes señoriales corresponde, efectivamente, frente al poder regio o absoluto, al insistir en que la jurisdicción que se les da es acumulativa para que se pueda apelar al Señor o Rey, y no privativa.
La burocracia ya sea civil o militar, de este largo periodo acertó en poner en práctica los fines para los que había sido concebida, mejor de lo que algunos puedan pensar.

Sevilla, abril de 2012.

jueves, 27 de septiembre de 2012

Debate abierto ¿Estamos en la senda de un cambio de modelo organizacional para con el Estado? El Modelo Federal. Notas básicas.




Un ejemplo, de los varios proyectos existentes, para la puesta en marcha de  un modelo Federal en nuestro país. La Federación contaría con 6 territorios federados sitos en la península y 2 fuera de ella.

PLANTEAMIENTO GENERAL.

En estos días hemos asistido a la reapertura del debate público acerca del cambio de modelo organizacional del Estado español. Los protagonistas de reabrir el mismo lo encarnan los máximos responsables del principal Partido de la oposición, PSOE, al hilo de las declaraciones de corte independentista provenientes del Gobierno catalán y una parte de la sociedad de esta Comunidad, que aboga por la secesión del Estado español como alternativa, a la salida de la crisis. Es lo que plantean, otra cuestión es que la misma se pueda materializar constitucionalmente hablando[1].

Es palmario que el Estado de las Autonomías español necesita una exploración profunda para evaluar aquellas variables viciadas con las que nació y que el paso de los años ha hecho no otra cosa que, acrecentar las lagunas constitutivas. La crisis ha servido para sacar a relucir algunas cuestiones funcionales de las Autonomías en España. El debate sobre este particular gira, a mi juicio, en dos vertientes: A) Analizar, chequear, evaluar y concluir cuál es el estado del Estado (valga la redundancia) Autonómico. B) Reflexionar desde diferentes fuentes de pensamiento o Teorías del Estado, si es posible implementar un nuevo modelo organizacional en nuestro país, analizar cuál es el más idóneo dadas las características culturales, políticas, sociales y económicas del Estado español, siempre teniendo en cuenta los límites constitucionales del Texto Supremo (CE).

Son muchas las cuestiones que me sobrevuelan a saber;  En primer lugar ¿La CE contempla el cambio de la Organización territorial del Estado? ¿Es consciente la gran mayoría de la sociedad española la necesidad de seguir manteniendo la actual distribución territorial del poder o sustituir dicho modelo autonómico por otra variante que responda mejor a las demandas y necesidades del pueblo español? ¿Están los diecisiete territorios autonómicos preparados para asumir un hipotético cambio en la lógica de la distribución funcional del poder para con el Estado central?

En este sentido, los llamados territorios históricos, especialmente Cataluña y País Vasco argumentan la necesidad de revisar el art 148 de la CE con el objetivo de avanzar en un mayor autogobierno del tipificado en dicho precepto constitucional. Buena parte de la clase política de ambas comunidades han tomando conciencia sobre la cuestión de ganar en autonomía política y acercarse a los principios constitutivos del modelo federalista. El hándicap principal es si determinados gobiernos autonómicos de menor entidad como Región de Murcia, La Rioja entre otras,  están capacitados para caminar de la mano del federalismo como modelo de Estado.

De momento, el debate está incluido en la agenda política de algunas Comunidades y parece que, en el medio plazo, uno de los grandes partidos de nuestro país PSOE  apostará de manera más decida, si no lo hace ya, por el federalismo como modelo de Estado para España.

 A continuación expongo, de forma sucinta, unas pinceladas acerca del origen del Federalismo y su evolución hasta la actualidad, para después tratar las principales características del Modelo Federal. Mi propósito es que este sencillo ensayo de pie  a la reflexión de quién lea estos párrafos y construya  a posteriori, una opinión sólida para defender o desechar la opción del federalismo como vía de escape a la crisis del Estado autonómico español.

1.- ORIGEN Y EVOLUCIÓN DE LAS FEDERACIONES DE ESTADO.
 Josep María Vallés nos cita tres razones fundamentales para arrojar una explicación teórica que pueden determinar la construcción de un Estado federal.

En primer término, la voluntad de integrar en una unidad política única a entidades previamente existentes, poniendo en común recursos y competencias que aseguren mejor su viabilidad frente a desafíos exteriores[2]. En la práctica el nacimiento de los Estados Unidos y Suiza se debió a este factor donde estados previamente existentes acordaron adherirse a una Federación de Estados para combatir la amenaza que ponía en boga su existencia como entes.

Otros  de los supuestos que nos podemos encontrar versan acerca de la necesidad de construir un Estado, en base a una sola unidad estatal, que aglutine a una serie de territorios diversos unidos por la dependencia colonial de una misma metrópoli. Tal es el caso de varios países de América Latina, Australia, Canadá entre otros.

En última instancia la Federación puede cristalizar de la voluntad del poder político para desconcentrar el mismo en diversos niveles de poder que vengan a dar respuesta a las particularidades culturales, sociales, económicas o de otra índole de un Estado Unitario. Así pues, nos podemos encontrar diferentes ejemplos; Alemania tras la II Guerra Mundial o Bélgica después de 1980.

La evolución de los Estados federales ha supuesto una mayor cooperación entre la Federación y los territorios federados, con el firme propósito de hacer frente a problemas colectivos que ya no son solubles con la sola intervención de un único nivel territorial[3]. Esta cooperación interterritorial exige la puesta en marcha de mecanismos tendentes a la coordinación de políticas públicas destinadas a dar una respuesta eficaz a las demandas ciudadanas.

Dicha evolución de los Estados federados ha ido de la mano de la progresiva descentralización del poder político acaecida en los llamados Estados unitarios. En estos Estados se ha producido, de forma gradual, una redistribución del poder siguiendo fórmulas híbridas cercanas al federalismo. La necesidad de distribuir el poder político en otros niveles de gobierno responde a dos necesidades políticas: De una parte, adecuar las demandas sociales singularizadas que un poder muy centralizado no puede identificar. De otra, se propugna una mayor facilidad para exigir responsabilidades a quienes deciden en representación de los destinatarios de la decisión[4].

2-. PRINCIPALES CARACTERÍSTICAS DE UN ESTADO FEDERAL.
La distribución territorial del poder se establece en buena medida sobre dos corrientes  o modelos: Estado Unitario, con sus variantes y Estado compuesto.
El rasgo definitorio de los Estados Compuestos responde a la necesidad de distribuir el poder entre Instituciones que controlan ámbitos territoriales diferentes. Existe, por tanto, un acuerdo primigenio para compartir el poder entre niveles de gobierno dándose la particularidad de que un centro político pueda imponer su política al resto de Instituciones habidas dentro del Estado.
En efecto, los Estados compuesto defienden el principio de coordinación horizontal para llevar a cabo la repartición del poder político e institucional en detrimento de la lógica jerárquica sobre este particular propia de los Estados Unitarios.

El Estado Federal responde a estas premisas siendo pues el caso más frecuente de lo que hemos dado en llamar Estado compuesto. El mismo agrupa entidades políticas que reciben una nomenclatura diferente según la tradición política del lugar. Así pues en Estado Unidos, padre del federalismo como modelo organizacional de Estado, las entidades territoriales responden al nombre de Estados. También utilizan dicha denominación países como Brasil o India. Diferentes nombres en otros Estados como Alemania  länder, cantones en Suiza  o provincias en Canadá.

El modelo federal no responde a un único modelo dado que cuenta con diferentes configuraciones dependiendo del Estado en el que nos encontremos.  Sin embargo,  tomando como referencia a los padres del federalismo EEUU y a posteriori Suiza, podemos dibujar unas características generales de Estado Federal:

1-      Una distribución constitucional de competencias que corresponde de forma inequívoca a la Federación de Territorios y dejando el resto para los Estados o cantones federados. Un ejemplo de competencias exclusivas de la federación de Estados son defensa,  la política monetaria, la política exterior entre otras. Se trat por tanto de señalar que competencias pertenecen a la Federación y cuales a los territorios federados a la misma.

2-      Papel determinante de cómo se  efectúa la distribución competencial en materia tributaria y fiscal, especificando que competencia corresponde a la Federación y cuales entre los territorios federados señalando así el límite para establecer tributos en estos últimos.

3-      La creación de Instituciones federales (Parlamento, Gobierno Federal, Tribunales Supremos etc.) donde participen en su composición los territorios federados de forma relevante para los intereses de ambas entidades (Federación y Estados Federados).

4-      Muy importante que cada territorio federado posea una Constitución propia que establezca cada una de las instituciones de Gobierno.

5-      En el supuesto caso de conflictos entre territorios federados o un territorio específico con la Federación es necesario establecer un Tribunal Federal  que conozca y dirima dichos enfrentamientos.

3. LAS FEDERACIONES EN EL MUNDO.
Según la publicación del Handbook of Federal Countries (2002)[5] más del 40% de la población mundial vive en estados cuya estructura corresponde a una lógica federal o parafederal sumando un total de 25 federaciones repartidas por los 5 continentes. Los principales estados federales son Estados Unidos, India, Rusia, Brasil, México, Alemania, Canadá, Suiza, Australia, Argentina, Austria, Malasia y Bélgica.

4. CONCLUSIONES.
Lo expuesto en los párrafos anteriores no es más que las líneas maestras configuradoras de una posible alternativa  para abordar el cambio organizacional del modelo de Estado en nuestro país. La realidad es compleja, puesto que en dicho proceso intervienen una amalgama de actores, instituciones, intereses difícil de conciliar si no es por la vía del consenso. La tendencia actual en relación a la distribución territorial del poder está marcada sobremanera por el fenómeno de la globalización de la política que nos lleva a dibujar un escenario cada vez heterogéneo y difuso.
La nueva configuración de la distribución territorial es fruto de la integración de los dos modelos clásicos: Por una parte se intenta hacer acopio de los postulados integradores propio del modelo unitario para combinarlos en segundo término con la lógica pluralista del poder que trae  aparejado el modelo federal.
La preguntas está abierta ¿Hacia qué modelo de Estado camina España?

Es hora de buscar respuesta desde diferentes disciplinas y enfoques.





[1] Sobre este particular estamos trabajando para ofrecer un monográfico acerca del Independentismo catalán desde la óptica de Derecho Constitucional y la Ciencia Política.
[2] VALLÉS Josep María  (2006). Ciencia Política. Una Introducción. Barcelona. Ariel.  pp.  184.
[3] VALLÉS, Josep María, (2006) Ob.Cit.  pp. 184.
[4] VALLÉS, Josep María, (2006) Ob. Cit. pp. 184.